¿Fatiga y debilidad? Podrían ser signos de Envenenamiento por Arsénico.
Imagina despertar un día y descubrir que el agua que has estado bebiendo durante años está contaminada con un veneno silencioso e invisible.
Sabemos que hoy en día, el acceso a agua potable limpia no siempre es el mejor. Ya sea debido a una infraestructura deficiente como se menciona aquí o quizás recurrimos a soluciones poco atractivas como el reciclaje de aguas residuales debido a la escasez del recurso.
Algunos pueden sentirse tranquilos al pensar que no tienen que preocuparse por eso ya que tienen su "fuente confiable" de agua como sus propios pozos de agua, pero ¿sabías que estos podrían estar contaminados con metales como el arsénico?
El arsénico es un veneno insidioso que se encuentra naturalmente en la tierra y las rocas, y su presencia en las aguas subterráneas ha afectado a países de todo el mundo, desde Bangladesh hasta los Estados Unidos. A pesar de ser incoloro, inodoro e insípido, el arsénico es altamente tóxico y se ha relacionado con una serie de problemas de salud, incluyendo varios tipos de cáncer, enfermedades cardiovasculares y diabetes.
La historia comenzó en Bangladesh en la década de 1980, cuando los médicos y científicos comenzaron a notar síntomas preocupantes en sus pacientes: manchas en la piel, callos inusuales en las palmas de sus manos y plantas de sus pies, e incluso la aparición de enfermedades vasculares como la "enfermedad del pie negro"."Lo que parecía ser una solución ingeniosa para proporcionar agua limpia, como el uso generalizado de pozos tubulares, terminó siendo un desastre de salud pública debido a la presencia de altos niveles de arsénico en el agua subterránea.
Aquí están los posibles efectos de la presencia de Arsénico en el agua:
Toxicidad Crónica: La exposición prolongada al arsénico en el agua puede causar una amplia gama de problemas de salud, desde enfermedades de la piel hasta cáncer.
Cáncer: El arsénico en el agua potable se asocia con un mayor riesgo de cáncer de piel, pulmón, vejiga, hígado y riñón.
Enfermedades Cardiovasculares: La exposición crónica al arsénico puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión arterial y la enfermedad cardiovascular.
Daño Neurológico: El arsénico en el agua también puede afectar el sistema nervioso central y causar daño neurológico, que puede manifestarse como problemas de memoria, dificultades de aprendizaje y trastornos de comportamiento.
Signos y Síntomas de Envenenamiento por Arsénico:
Problemas de Piel: Entre los primeros signos visibles de envenenamiento por arsénico se encuentran lesiones cutáneas como hiperpigmentación, hiperqueratosis y úlceras.
Molestias Gastrointestinales: Los síntomas gastrointestinales incluyen dolor abdominal, náuseas, vómitos, diarrea y otros trastornos digestivos.
Neuropatía Periférica: La exposición crónica puede causar daño a los nervios periféricos, lo que lleva a sensaciones anormales, entumecimiento y debilidad en las manos y los pies.
Cansancio y Debilidad: El envenenamiento por arsénico puede causar fatiga crónica, debilidad muscular y una sensación general de malestar.
Problemas Respiratorios: En casos graves, inhalar arsénico liberado durante la ducha o la cocina puede causar problemas respiratorios, como tos, dificultad para respirar y opresión en el pecho.
Según el sitio de noticias CNN "Los investigadores han observado que el cambio climático puede influir en los niveles de arsénico en pozos privados, ya sea a través de inundaciones más severas, aumento del nivel del mar o sequías.
Un estudio de investigación a escala nacional realizado por el US Geological Survey en 2021 encontró que durante los períodos de sequía, el riesgo de exposición al arsénico aumentó significativamente en aproximadamente un 54%. Los estados más afectados fueron Ohio, Michigan, Indiana, California y Maine.
Melissa Lombard, una hidrologista de investigación del USGS, señaló que la sequía puede alterar la dirección del flujo de agua hacia los pozos, alterando también los niveles de oxígeno y pH, lo que afecta la cantidad de arsénico que puede disolverse en el agua.
Es hora de cuestionar la seguridad del agua, incluso de fuentes aparentemente seguras como los pozos privados. "
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