Invasores invisibles: Los nanoplásticos y su impacto en la salud humana

Invasores invisibles: Los nanoplásticos y su impacto en la salud humana

Hoy nos enfrentamos a un reto invisible pero cada vez más alarmante para nuestra salud: los nanoplásticos. Estas diminutas partículas, capaces de infiltrarse en nuestro organismo a través de los alimentos o por inhalación, están siendo identificadas como una grave amenaza para nuestro bienestar.

Investigaciones recientes han revelado que una botella de agua de 1 litro puede contener más de 240.000 fragmentos de nanoplásticos, sobre los que puede leer con más detalle aquí. Estas partículas tienen el potencial de entrar en nuestro torrente sanguíneo, alterar nuestra microbiota intestinal, causar inflamación e incluso deterioro cognitivo.



Además, otro estudio descubrió que no sólo afectan a los adultos, sino que también tienen la capacidad de transferirse de las ratas preñadas a sus crías nonatas, lo que supone graves riesgos para el desarrollo del feto.

Esta investigación sugiere que el proceso podría ser similar en los seres humanos, lo que supone un importante motivo de preocupación para la salud pública y pone de relieve la urgencia de seguir investigando el impacto de los microplásticos y nanoplásticos en el cuerpo humano.

Impacto de los nanoplásticos en la salud

Los nanoplásticos pueden afectar a la salud humana de diversas maneras:

  • Alteración de la microbiota intestinal y de la barrera intestinal: Los nanoplásticos pueden interactuar con diversas moléculas del epitelio intestinal, alterando la microbiota y la secreción de moco, esenciales para una barrera intestinal sana.
  • Estrés oxidativo y genotoxicidad: La gran superficie de los nanoplásticos facilita la generación de especies reactivas de oxígeno, que pueden dañar las células, las proteínas y el ADN, pudiendo provocar mutaciones y cáncer.
  • Neurotoxicidad y deterioro cognitivo: Existen pruebas de que los nanoplásticos pueden atravesar la barrera hematoencefálica, afectando al sistema nervioso y contribuyendo al desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.
  • Desregulación del sistema inmunitario: Los nanoplásticos pueden ser tratados como invasores por nuestro sistema inmunitario, provocando una inflamación crónica vinculada a enfermedades crónicas como problemas cardíacos y diabetes.
  • Toxicidad para la reproducción y el desarrollo: La interferencia de los nanoplásticos con nuestras hormonas podría afectar al desarrollo fetal y a la salud reproductiva.
  • Bioacumulación y efectos a largo plazo: Debido a su durabilidad, los nanoplásticos pueden acumularse en el organismo, lo que hace temer daños irreversibles y problemas de salud emergentes.

En la actualidad se han desarrollado tecnologías que pueden proporcionarle a usted y a su familia un suministro de agua seguro y libre de estas sustancias químicas, como NUBE, que genera agua a partir de la humedad del ambiente. Tiene su propio sistema de filtrado, mineralización y almacenamiento con una fuente UV para mantener el agua libre de patógenos.

Y usted, ¿ya está tranquilo con su suministro de agua? Consigue tu NUBE aquí.

Deje un comentario

Todos los comentarios son moderados antes de ser publicados